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30/11/2021  - UX/UI Design

4 reglas UX para montar una startup tecnológica

Es muy probable que, si te has decidido a darle un giro de 180º a tu carrera profesional, uno de tus objetivos a medio-largo plazo, sea montártelo por tu cuenta y… quizá montar una startup tecnológica. Hoy queremos contarte qué debes tener en cuenta para que todo vaya sobre ruedas. Eso sí, antes de comenzar con el cuento de la lechera, debes buscar un tipo de formación concreta, un bootcamp UX/UI por ejemplo, puede convertirte en un auténtico profesional experto ¿Empezamos? Las nuevas empresas tecnológicas aparecen como setas últimamente, en su mayoría de la mano de programadores que, sin embargo, no tienen demasiada idea de diseño UX lo que provoca que el cliente no encuentre respuesta a sus preguntas y la cosa no acabe especialmente bien. Por eso es importante que, si quieres formarte en uno de los perfiles profesionales más demandados por las empresas, a la hora de poner en marcha tu propia startup tecnológica, conozcas lo antes posible el proceso de desarrollo. No te pases con la creatividad a la hora de diseñar Seguro que tienes ideas arrebatadoramente revolucionarias, pero eso no significa que cualquier diseño que se te venga a la cabeza sea automáticamente apto para el propósito que se busca. Las únicas opiniones que realmente importan cuando se trata de UX son las de los usuarios, lo que no permite demasiado espacio para el diseño. Esta es una de las primeras reglas que debes aceptar y, probablemente, la más difícil de asumir. A todos nos gusta pensar que nuestras ideas son maravillosas, incluso en temas que no terminamos de manejar. Pero en este campo, conviene ser muy humilde. No se trata de reinventar la rueda. Salvo justificación tremendamente convincente, es importante seguir los estándares UX que ya existen y ofrecerle a tus usuarios algo reconocible en lugar de algo revolucionario (las novedades no siempre se asumen de manera positiva). Ser creativo es genial, pero si no cala en los usuarios, tu creatividad no puede formar parte del proceso de diseño de UX. Ojo, con esto no queremos decir que no desarrolles tu creatividad, todo lo contrario. Es algo importante en el diseño UX, pero también lo es mantener los pies sobre la tierra y tener muy claro para quién trabajamos. La psicología del usuario  Si te dedicases al Marketing Digital seguro que afirmarías que el contenido es el rey, y aunque esto tiene mucho de verdad, existen otros datos que lo convierten solo en el príncipe.  ¿Qué queremos decir? Muy sencillo, la psicología del usuario es de vital importancia. El contenido es importante, por supuesto, pero el diseño UX es la otra pieza imprescindible del puzzle. De hecho, los mejores diseñadores de UX saben mucho de psicología, y estudian cuidadosamente cómo y por qué los usuarios se comportan de una manera u otra. El tipo de usuario final no es siempre el mismo, variarán de innumerables formas. No podrás conocerlos a todos, pero sí hacer un estudio general con el que podrás determinar perfiles que cubran a la mayoría de tu público objetivo. Diseños sencillos Las mejores experiencias de usuario se optimizan y reducen para lograr velocidad y eficiencia. No se trata solo de comprimir imágenes, usar un lenguaje claro y evitar la entrada de datos innecesaria, hay mucho más por hacer. Incluso cuando piensas que ya lo has reducido al máximo, probablemente todavía puedas eliminar más. Cuando se pone en marcha un prototipo de UX, debes revisar cada elemento (cada imagen, CTA, párrafo, botón, etc) y hacerte una pregunta: "¿Es esto realmente necesario?". Si lo puedes eliminar, ¿el usuario final se pierde algo importante? ¿Le resultará más difícil navegar o le gustará menos el sitio?”. Si un elemento no justifica su presencia, elimínalo sin remordimientos. Un diseño sencillo es más fácil de mostrar, comprender, ejecutar y mantener. Y siempre estarás a tiempo de añadir algo si es necesario más adelante. Mantener la coherencia Muchos diseños resultan extremadamente confusos ya que tienen elementos variables y pistas contextuales poco claras. Esta confusión provoca malestar e irritación que aleja a los usuarios.  Un ejemplo claro de esto lo tenemos en elementos visuales tan básicos como los iconos. Por lo general no le prestamos mucha atención cuando hacemos uso de ellos de una manera correcta, pero destacan mucho cuando se usan mal. ¿Podemos cambiar los colores? No hay problema ¿Y la fuente? OK ¿Modificar los iconos o la navegación básica? Mmm... igual no es la mejor idea. La transformación digital ha ofrecido numerosas posibilidades de desarrollo; sin embargo, que se haya abierto esa puerta, también ha provocado que el talento digital de verdad se vea ensombrecido por profesionales que no tienen muy claro qué es lo que están haciendo.  La experiencia de usuario en el sector digital es una de las bases de la funcionalidad que no puede pasarse por alto. Así que, si estás decidido a comenzar con una formación inmersiva en los bootcamps de The Bridge porque tienes la ilusión de poner en marcha un proyecto, y romper de una vez la brecha digital, no te lo pienses más ¡Ha llegado tu momento!  
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